Las autoridades de la Ciudad de Miami ordenaron el cierre del icónico bar Ball & Chain pero sus dueños aseguran que es una venganza política
Como si la pandemia que nos azota no fuera suficiente, el cierre de Ball & Chain a fines de octubre ha llenado de tristeza a la comunidad de la Pequeña Habana y su vida nocturna.
El local ya se había visto obligado a cerrar por la pandemia y luego a reabrir al 50 por ciento, así que este es otro duro revés que le toca vivir y que le duele a toda la economía local.
El argumento de los funcionarios de la Ciudad de Miami para clausurar este local inaugurado en 1935, fue que estaba violando los códigos de seguridad contra incendios y el cumplimiento de la Ley sobre estadounidenses con Discapacidades (ADA, por sus siglas en inglés).
PROPIETARIOS VS LA CIUDAD
Bill Fuller, uno de los copropietarios de Ball & Chain, asegura que todos los papeles y permisos están en regla, y que el cierre de su negocio obedece a una venganza política del comisionado Joe Carollo porque él y Zack Bush, el otro propietario, apoyaron al candidato opositor al político republicano en unas pasadas elecciones.
“Hay mucha corrupción en la ciudad de Miami, comenzando por el comisionado de este distrito. Él es una cucaracha total, y también gran parte de la administración que tiene operando con miedo, por lo que esencialmente trabajan a sus órdenes ", declaró Fuller a Channel 7 News.
Por su parte, Bush publicó detalles de las remodelaciones y permisos de Ball & Chain en un extenso posteo en su cuenta de Facebook, el 22 de octubre:
“Cuando por una orden del gobierno y por razones de seguridad del COVID-19, B&C se vio obligado a cerrar a principios de este año, decidimos usar el tiempo de inactividad para trabajar en una serie de construcciones para mejorar el lugar. Para ser claros, antes del COVID-19, B&C había sido citado por la Ciudad por hacer obras de construcción sin un permiso y como resultado habíamos acordado rehacer TODO lo que la ciudad quería y de la manera que la Ciudad quería que se hiciera”, indica Bush.
Sin embargo, el administrador de la ciudad de Miami, Arthur Noriega, emitió un comunicado el 26 de octubre en el que afirma que esta no es la primera vez que los dueños de Ball & Chain incurren en violaciones a las reglamentaciones.
“Nuestras acciones se tomaron para garantizar la seguridad de la vida. Si bien la ciudad simpatiza con los empleados y clientes de Ball and Chain y otras empresas locales durante estos tiempos difíciles, nuestro deber primordial sigue siendo proteger la seguridad de nuestros residentes.”, dijo.
¡AYUDEMOS A BALL & CHAIN!
El cierre de Ball & Chain, situado sobre la famosa Calle Ocho, perjudica a más de 100 empleados y sus familias.
Se necesita la ayuda de toda la comunidad para que pueda reabrir. ¡Firma la petición aquí!